Esta chiquitina es un encanto, y se merece un hogar donde la cuiden, y la quieran. Tiene la orejita partida de algún mordisco que habrá recibido. La verdad es que lo que más me llamó la atención es que es muy pequeñita, a pesar de estar gordita solo pesa 1.350 gr.
Las personas que la encontraron dicen que les gruñía y como que quería morder, que los tenían separados por eso. Como no va a morder si tenía a las crías y les abandonaron junto con el macho y las crias en una caja. Se vería indefensa, tenía que defender a sus gazapos en un ambiente desconocido y aguantar el acoso del macho salidorro.
Creo que ha sufrido mucho para lo pequeñita que es.
Lo poco que la tuve, se mostro tranquila dentro de su desconfianza, y en ningún momento me gruñó, ni me mordio.
Animo chiquitina, que te mereces una segunda oportunidad, pero ésta de verdad.
